Un juez de Nueva York debe decidir el futuro del caso contra Donald Trump
El juez instructor del caso contra Donald Trump por la compra del silencio de una exactriz porno debe decidir este martes si lo desestima, como pide la defensa, o procede con la sentencia tras ser declarado culpable por un jurado popular.
Trump fue declarado culpable en mayo pasado de 34 cargos por "falsificación contable agravada" en el pago de 130.000 dólares a la exactriz de cine porno Stormy Daniels para que guardara silencio sobre una supuesta relación extramatrimonial en 2006, que el magnate de 78 años siempre ha negado.
La defensa de Trump defendió la semana pasada en un mensaje al juez Juan Merchan que había nuevos elementos para la desestimación del caso.
"La suspensión y la desestimación son necesarias para evitar impedimentos inconstitucionales a la capacidad de gobernar del presidente Trump", que regresará a la Casa Blanca el próximo 20 de enero, había alegado su abogado Emile Bove.
Pero el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, se mostró este martes contrario a su anulación pese a la situación generada tras su aplastante victoria en las elecciones del 5 de noviembre, que derivaría en la inmunidad presidencial.
Bragg considera que se pueden "aplazar" los procedimientos mientras se resuelve la moción para la anulación del caso.
El juez Juan Merchan tenía previsto anunciar la sentencia el próximo 26 de noviembre.
"Ninguna ley establece que la inmunidad temporal de un presidente requiere la anulación de un proceso criminal a posteriori que se inició cuando el acusado no era inmune (...) y que se basó en una conducta privada por la que el acusado tampoco es inmune", reza un escrito de Bragg.
No obstante, precisa, "no pretendemos oponernos a la suspensión del procedimiento mientras se espera la resolución de la petición" del defendido para desestimar su caso.
Asimismo recuerda el "respeto profundo por el papel fundamental del jurado en nuestro sistema constitucional" que halló culpable al magnate republicano al término de seis semanas de juicio.
Antes de las elecciones, la defensa del magnate republicano ya había intentado anular el proceso o realizar un nuevo juicio tras el fallo de la Corte Suprema sobre la inmunidad presidencial por actos oficiales.
Trump, el primer expresidente en sentarse en el banquillo, se enfrenta a cuatro años de cárcel por este caso, aunque los expertos se esperan una condena muy inferior o incluso libertad condicional.
- Veredicto popular -
Trump ha reiterado que sus problemas con la justicia son una "caza de brujas" con motivaciones políticas.
Tras el parecer del fiscal, el director de comunicaciones del magnate, Steven Chung declaró: "El fiscal de Manhattan ha reconocido que esta caza de brujas no puede continuar. El caso sin ley está ahora suspendido, y el equipo legal del presidente Trump se está moviendo para conseguir que sea desestimado de una vez por todas", dijo.
Sus abogados han hecho todo lo posible para anular el proceso de la justicia del estado de Nueva York y retrasar más allá de 2024 otros tres procesos penales relacionados con los supuestos intentos del republicano de anular los resultados de las elecciones de 2020 y la retención de documentos clasificados después de haber dejado la Casa Blanca.
Jack Smith, el fiscal especial nombrado para investigar y acusar a Trump en dos casos federales, ha pedido tiempo hasta el 2 de diciembre para poder analizar la situación generada por su aplastante victoria en las presidenciales del 5 de noviembre, una "circunstancia sin precedentes, y determinar los pasos apropiados en línea con la política del Departamento de Justicia".
De momento, el caso del intento de Trump de revertir los resultados de la elección de 2020 el 6 de enero de 2021 y el del manejo de documentos clasificados tras abandonar la Casa Blanca han quedado en suspenso.
Tras la decisión de Nueva York y otro en Georgia por tratar de interferir en el resultado electoral en ese estado.
"El veredicto final de la democracia sobre estos procesamientos lo dieron los votantes el día de las elecciones", escribió recientemente Thomas Goldstein, abogado especializado en la Corte Suprema en la web SCOTUSblog.
Más de 76 millones de personas votaron por el magnate pese a sus problemas con la justicia, que "ocuparon un lugar destacado en la campaña", recordó.
El presidente electo pretende pasar página con lo que considera una "instrumentalización" del poder judicial en su contra cuando llegue a la Casa Blanca.
Como secretario de Justicia y Fiscal General (equivalente al ministro de Justicia) ha designado al republicano Matt Gaetz, él mismo con problemas judiciales, que se anuncia como el nuevo justiciero.
Varios abogados que le defendieron en sus asuntos judiciales, como Todd Blanche y Emil Bove, han sido nombrados vicefiscal general, y vicefiscal general adjunto, respectivamente.
H.Lentz--LiLuX