Un palestino muere en un ataque de israelíes a una localidad de Cisjordania
Un palestino murió el miércoles baleado en un ataque cometido por decenas de israelíes contra una localidad de Cisjordania ocupada, último episodio de la nueva escalada de violencia que sacude la región.
Entre 200 y 300 civiles israelíes entraron en la tarde del miércoles en la localidad de Turmus Ayya, prendiendo fuego a terrenos agrícolas, viviendas y decenas de vehículos, relataron habitantes y el alcalde de la localidad, Lafi Adib, a AFP.
"Un martir llegó al Complejo Médico Palestino procedente de Turmus Ayya tras ser disparado en el pecho", indicó el ministro de Salud palestino en un comunicado.
El ataque se producía solo horas después de los funerales de dos adolescentes, un israelí y una palestina, muertos respectivamente en un tiroteo llevado a cabo por palestinos y una redada del ejército isrelí en localidades cercanas de Cisjordania.
Según Adib, 35 viviendas resultaron dañadas, y medio centenar de vehículos y tierras de cultivo incendiadas.
"En Turmus Ayya nos vemos atacados día trar día por la agresiva avanzadilla de los colonos" establecidos en la zona, afirmó el responsable local.
Periodistas de AFP vieron casas y edificios quemados y heridos evacuados en ambulancia.
"Los colonos nos dispararon y cuando la policía y el ejército israelí llegaron, nos lanzaron balas de goma y gas lacrimógeno", explicó Awad Abu Samra, otro residente.
El ejército israelí dijo que las fuerzas de seguridad entraron en el pueblo para "extinguir las llamas, evitar enfrentamientos y recoger pruebas" después de que "civiles israelíes quemaran vehículos y propiedades de palestinos".
Doce personas resultaron heridas durante este último ataque, según el ministerio palestino.
El episodio se produjo tras el funeral de Nahman Mordof, 17 años, de un vecino asentamiento israelí. El joven es uno de los cuatro israelíes muertos el martes cerca de la colonia judía de Eli, entre Ramala y Naplusa, en Cisjordania, por disparos de atacantes palestinos que a su vez fueron abatidos por el ejército.
- Un ataúd portado por colegialas -
Una palestina de 15 años, Sadil Naghnaghiya, herida el lunes durante una larga redada israelí en Yenin, falleció y fue enterrada el miércoles. Fueron sus compañeras de instituto quienes, entre lágrimas, acarrearon el ataúd.
Otros seis palestinos, incluidos otro adolescente de 15 años y un combatiente de la Yihad Islámica, murieron durante la misma incursión isralí, según el ministerio de Salud.
Un portavoz del grupo militante palestino Hamas, Hazem Qassem, dijo que el ataque del martes era una "respuesta a los crímenes de la ocupación (israelí)" en Yenín y en el resto de territorios palestinos.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que el gobierno aceleraría la expansión del asentamiento en Eli en respuesta al ataque.
"Nuestra respuesta al terrorismo es atacarlo con fuerza y construir nuestro país", dijo, pese a los repetidos llamamientos de Naciones Unidas a Israel para que detenga la expansión de asentamientos.
Israel ocupa Cisjordania desde la Guerra de los Seis Días de 1967. Excluyendo el este de Jerusalén, también anexado, el territorio ahora alberga a unos 490.000 israelíes que viven en asentamientos considerados ilegales según el derecho internacional.
- Más represalias -
A lo largo del martes se reportaron ataques de colonos en múltiples localidades palestinas del norte de Cisjordania, incluída Huwara, Al-Lubban al-Sharqiya, cerca de Eli, y Beit Furik.
Varias decenas de personas resultaron heridas, según la Luna Roja palestina.
El episodio del miércoles en Turmus Ayya se parece a la represalia llevada a cabo por colonos en febrero tras otro ataque palestino contra israelíes en la misma zona.
Un miembro de extrema derecha del gabinete de Netanyahu, Bezalel Smotrich, pidió más tarde que se "aniquilara" a Huwara.
Tras el ataque en Eli, el ejército israelí anunció el miércoles la detención de "tres personas buscadas (...) para su interrogatorio", durante una operación en la aldea palestina de Urif, de donde provenían los dos atacantes muertos, y el mapeo de sus residencias.
Israel suele destruir las viviendas de los palestinos acusados de ataques contra israelíes aludiendo a un supuesto efecto disuasorio frente a futuros ataques.
Desde principios de año, han muerto en actos de violencia relacionados con el conflicto israelo-palestino al menos 171 palestinos, 25 israelíes, un ucraniano y un italiano, según un recuento de AFP compilado a partir de fuentes oficiales israelíes y palestinas.
V.Bertemes--LiLuX