Contratos y alfombra roja para el primer ministro indio en EEUU
La visita de estado del primer ministro indio, Narendra Modi, a Washington el jueves desembocará en la firma de numerosos contratos, en particular de defensa, para satisfacción de los estadounidenses, ansiosos de sanar su relación con India.
Modi será recibido en primer lugar por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, con honores militares, antes de una entrevista en la Oficina Oval.
Los dos líderes, que emitirán un comunicado conjunto, se dirigirán a continuación a la prensa y responderán a sus preguntas, un hecho poco común para el jefe del gobierno nacionalista hindú.
Luego el líder asiático irá al Congreso, y después a una cena de gala en los jardines de la Casa Blanca, en torno a un menú que, en su honor, será vegetariano e inspirado en la cocina india.
Dejando a un lado los eventos sociales, el anuncio más esperado del jueves será sobre la futura fabricación en India de motores F-414 para aviones de combate por parte de la compañía General Electric, dijo un alto funcionario estadounidense en una entrevista con periodistas.
- "Pionera" -
Esta misma fuente, que pidió el anonimato, consideró que se trataba de una "iniciativa pionera", que conducirá a importantes transferencias de tecnología estadounidense.
El mismo alto funcionario también indicó que India "se comprometió a la adquisición de drones de combate estadounidenses" y agregó, sin dar detalles: "Estamos absolutamente encantados".
Biden solo puede estar, en efecto, encantado de ver a India diversificando su equipamiento en defensa, ya que históricamente el país ha dependido de Rusia en esta área.
El grupo estadounidense Micron, peso pesado en la fabricación de semiconductores, esenciales en el terreno de la informática, anunciará, según otro alto funcionario estadounidense, una inversión de más de 800 millones de dólares en una fábrica en India.
El alto funcionario dijo que correspondía a Estados Unidos e India construir un "ecosistema de semiconductores que permita la diversificación de las cadenas de suministro", cuya fragilidad fue evidenciada por la pandemia de covid-19.
Biden y Modi anunciarán también, según altos funcionarios de la Casa Blanca, iniciativas conjuntas en exploración espacial y metales estratégicos, así como asociaciones marítimas y la apertura de consulados.
- Sin sermones -
La recepción con gran pompa que le espera al primer ministro indio ilustra el deseo de Estados Unidos de profundizar la asociación con el país más poblado del mundo.
Biden quiere creer que las ambiciones de China, que preocupan a Nueva Delhi y que Washington está haciendo todo lo posible por contrarrestar, convencerán a India de volcarse hacia Estados Unidos.
Y ello incluso si este país históricamente no alineado probablemente nunca se convierta en un aliado puro y duro.
Para fortalecer la relación bilateral, el demócrata de 80 años, que ha prometido articular su política exterior en torno a la defensa de la democracia, debería evitar abordar el tema de los derechos humanos y las libertades demasiado directamente con el primer ministro indio.
Numerosas asociaciones acusan a Modi de alimentar las persecuciones contra la minoría musulmana en Cachemira y de presionar tanto a la prensa como a la oposición política.
El presidente estadounidense "aborda estas discusiones y temas (en torno a la democracia) con cierta dosis de humildad", dijo un alto responsable de la Casa Blanca, destacando que Estados Unidos "tiene sus propios problemas" en la materia.
Biden "busca tener un diálogo basado en los desafíos comunes (...) en lugar de sermonear o reprender", dijo.
E.Klein--LiLuX