La fiebre inmobiliaria en El Cairo golpea por igual a vivos y muertos
Desde la llegada al poder de Abdel Fattah al Sisi hace 10 años, El Cairo ha sido rediseñado a base de puentes y autopistas, en una "construcción frenética" que arrasa con barrios residenciales, espacios verdes e incluso cementerios históricos.
Con su "política de excavadoras", el presidente egipcio quiere establecer su "legitimidad" con grandes proyectos para "impresionar a la gente al construir muy grande y muy rápidamente", explicó a AFP Dalia Wahdan, profesora de la Universidad Americana de El Cairo.
Desde 2020, miles de tumbas de la Ciudad de los Muertos, la necrópolis más antigua del mundo musulmán declarada Patrimonio Mundial de la Unesco, han sido destruidas en El Cairo, segunda mayor capital africana con más de 20 millones de habitantes.
"Asustada" con la idea de que los restos de su padre "quedaron abandonados a orillas de la carretera", Salma prefirió transferir ella misma la mortaja blanca que contiene sus huesos.
Esta directora de mercadeo de 30 años, que utilizó un pseudónimo, llevará los restos a un cementerio a decenas de kilómetros de la Ciudad de los Muertos.
Otros centenares de personas han hecho como ella, porque ahora una larga autopista serpentea donde antes había mausoleos familiares.
Familias pobres se habían instalado en esas estructuras de ladrillo a falta de vivienda y tuvieron que irse después de trabajar como sepultureros durante varias generaciones o de construir viviendas informales que estaban a punto de ser demolidas.
- Una "X" pintada con aerosol -
En total, según el urbanista Ahmed Zaazaa, más de 200.000 egipcios han visto sus casas destruidas para dar lugar a proyectos de inversión o carreteras, como las que enlazan a El Cairo con la Nueva Capital Administrativa que surge de las arenas del desierto, con un presupuesto calculado por el centro de investigación Pomed en 58.000 millones de dólares.
Mientras el centro se gentrifica rápidamente, el Estado construye miles de viviendas en la periferia.
Centenares de familias se han reubicado allí tras ser notificadas e indemnizadas por su expulsión. Pero muchos otros se enteraron cuando vieron una "X" pintada con aerosol en el mausoleo que ocupaban.
Wahdan vio aparecer una X en la tumba frente a la de su esposo, recién fallecido.
"No estoy segura de que sobreviviré si tengo que mover su cuerpo", contó.
Khaled, de 26 años, quien también utilizó un pseudónimo, teme desde hace tres años el día en que una autopista haga desaparecer el mausoleo familiar construido en 1899.
Si se concretan los planes que vio, "en el mejor de los casos, el mausoleo estará al borde de la carretera, pero ni los encargados están seguros" de la ruta, lo que refleja una "confusión" permanente.
En los barrios pobres, los habitantes regularmente dicen ver llegar un funcionario municipal para censarlos, lo cual suele ser señal de que pronto llegarán las excavadoras.
Algunos "han obtenido compensación y están satisfechos", señaló Wahdan, pero muchos otros denuncian promesas incumplidas.
Las autoridades dicen querer "erradicar los barrios marginales" porque son insalubres. Pero para Wahdan, esa estrategia es "un caballo de Troya que apunta (...) a desalojar por la fuerza" a las familias que, una vez instaladas en las nuevas localidades alejadas de los servicios públicos del centro, no podrán llegar a fin de mes.
- "Más drástico que antes" -
Al mismo tiempo, barrios enteros son asignados para proyectos inmobiliarios, miles de árboles son cortados para ampliar las carreteras y barcazas utilizadas como vivienda han sido desalojadas para liberar espacio a orillas del Nilo.
Sisi ha aplaudido a su propio gobierno por la rapidez con que ha construido los megaproyectos, "solo 20-25% de los cuales habrían sido construidos" si las autoridades hubieran tomado el tiempo para hacer "estudios de factibilidad", declaró en 2018.
Es un escenario que se ha dado en el pasado.
En 1995, el escritor egipcio Khairy Shalaby narró la imagen de "excavadores arrasando el corazón del cementerio con una brutalidad infernal, palas mecánicas hundiéndose en la tierra y lanzando huesos de fallecidos al lado" para la construcción de la Autostrad, una de las grandes arterias de la ciudad.
"Pero eso era solo un tramo de parcelas y no fue tan brutal como lo que vemos ahora", declaró Wahdan.
"Este es un momento en la historia de El Cairo mucho más drástico que antes".
G.Muller--LiLuX