

Liberan a 29 policías y militares retenidos desde el jueves en el suroeste de Colombia
Los 28 policías y un militar retenidos desde el jueves por pobladores en un enclave guerrillero del suroeste de Colombia fueron liberados y entregados a una comisión gubernamental el sábado, constató un equipo de la AFP.
La Defensoría del Pueblo se encontró con los uniformados en un camino rural de unos cinco kilómetros que une dos comunidades rurales del sector. Cerca de las 15H00 locales (20H00 GMT), los retenidos ya habían comenzado a salir de la zona.
Los efectivos se encontraban en cautiverio en un centro de reuniones comunitario en la localidad de La Hacienda, en una región del departamento del Cauca conocida como el Cañón del Micay.
Habitantes locales, que habían instalado un cerco con una cuerda en el local, pidieron a los agentes recoger su equipamiento antimotines para retirarse.
Los uniformados comenzaron a salir del poblado por un camino de tierra de unos cinco kilómetros, formados en fila y escoltados por habitantes, algunos de ellos con sus rostros cubiertos.
Se dirigieron al poblado aledaño de El Plateado y, poco antes de llegar, fueron recibidos por una comisión de la Defensoría del Pueblo, el ente encargado de velar por los derechos humanos en Colombia.
El Cañón del Micay tiene una de las mayores concentraciones de narcocultivos en Colombia y es uno de los principales bastiones del Estado Mayor Central (EMC), un grupo de rebeldes que nunca se acogieron al acuerdo de paz entre la extinta guerrilla de las FARC y el gobierno en 2016.
En el camino, donde a cada lado de la carretera se observan los verdes cultivos de hoja de coca que se pierden en el horizonte, el mayor Nilson Bedoya, el único militar del grupo, aseguró con voz agitada no poder dejar de pensar "en mi familia, en mi esposa, mi hijo, que me están esperando en casa", mientras llevaba al hombro su equipamiento.
Funcionarios de la defensoría recibieron a los efectivos entre abrazos y sonrisas. Luego se pusieron al frente de la caravana, cuyo avance tuvo varias interrupciones cuando los pobladores avistaron el sobrevuelo de un dron.
Al llegar a El Plateado, la caravana se detuvo en una gasolinera donde se encontraban funcionarios de Naciones Unidas y un grupo de unos 20 soldados.
- Enfrentamientos y retención -
Los uniformados habían sido retenidos el jueves luego de una jornada de enfrentamientos entre pobladores de la zona y la fuerza pública, en medio de una operación para detener la violencia del narcotráfico.
La mayoría de los agentes se movilizaban en un vehículo blindado en medio de los desmanes, cuando este quedó envuelto en llamas, relataron a la AFP. "A Stiven lo prendieron vivo", dijo uno de ellos, refiriéndose a un compañero que tuvo que lanzarse a un charco de agua para salvarse del fuego.
Más temprano el sábado, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, advirtió en entrevista con W Radio que los efectivos serían liberados "por la sensatez" o por "la fuerza legítima del Estado".
Sánchez y otras autoridades del gobierno del izquierdista Gustavo Petro se reúnen con pobladores de la zona en la capital del departamento, Popayán, para escuchar los planteamientos de las comunidades.
El ejército lanzó en octubre de 2024 la incursión militar "Perseo" para retomar el control del Cañón del Micay.
El gobierno de Petro propone un ambicioso programa de sustitución de cultivos para sustituir la economía del narcotráfico, una estrategia que los pobladores de la zona han denunciado como una campaña de "erradicación forzada" de cultivos de coca.
"No va a haber erradicación de los cultivos a la fuerza (...) Aquí lo que sí hay es una erradicación de la mata de coca pero que tiene que ser voluntaria", dijo desde Popayán el ministro del Interior, Armando Benedetti, que denuncia una campaña de desinformación por parte de "los carteles de la coca" para engañar a la población.
El gobierno de Petro considera que los habitantes de la zona han sido "instrumentalizados" por el EMC, mientras las comunidades denuncian que una "militarización" de la región solo les traería más confrontaciones.
"Vamos a seguir trabajando por estas tierras para que la gente pueda tener un mejor futuro", dijo a la AFP el mayor Bedoya. "Al campesino le han vendido la idea de que nosotros somos sus enemigos, pero nosotros somos sus mayores aliados", agregó.
E.Molitor--LiLuX